Y COMENZAMOS...

Hoy, 15 de marzo de 2014 hemos colocado al centro de nuestra sala:  la Palabra.  Y alrededor de ella hemos iniciado nuestro día con una oración dirigida por Nancy. Escuchamos la Palabra y escuchamos la Voz del Señor en medio de nosotros que se hizo latente, fuerte y al mismo tiempo, suave a nuestro corazón.

Preparado y compartido nuestro primer desayuno en casa, fuimos a la casa de la comunidad Claretiana a encontrarnos con el Equipo Misionero de Jimaní.

P. Jesús María dio inicio a la reunión, invitándonos a todos a rezar la "Oración por el Fruto Apostólico". Expresaba el P. Jesús María que "mucho más importante que los proyectos y que la acción pastoral, somos las personas" y por esa razón comenzamos a presentarnos unos a otros, a compartir de dónde hemos venido, cuáles son nuestras cualidades, miedos, preocupaciones, trayectoria vocacional, etc.

Ismael, Ana, Rocio y Luisina

Fue un momento vivido desde la sencillez y la honestidad; donde la transparencia del corazón alegraba al hermano que nos acogía en la persona de Jesús.

Finalizamos este primer encuentro con la celebración de la Eucaristía, en donde desde en una misma y única misión, dimos gracias al Dios de la Vida por la bendiciones recibidas y pedimos porque siempre esté Él al centro de nuestro Equipo Misionero.

Celebración eucarística del Equipo Misionero

Mikel y Luisina nos animan con la música.

Los Voluntarios recibieron la Palabra (Biblia) y  la Autobiografía de San A. Ma. Claret